La experiencia de unirse a una nueva empresa siempre es un reto. La euforia por haber sido aceptado se mezcla con unas «mariposas en el estómago» por no conocer a la gente ni la cultura de la empresa. Me han aceptado, ¿y ahora qué? ¿Qué espera la empresa de mí? Me di cuenta de que estos sentimientos se producen independientemente de la antigüedad o la madurez profesional.
He pasado varias veces por este proceso, pero la experiencia que estoy teniendo en Belvo como Engineering Manager está siendo tan buena que me ha animado a escribir este artículo y quizás ayudar a otros.
En mi carrera profesional, tuve algunas experiencias bastante desorganizadas en el arranque en otras empresas, en las que básicamente recibía acceso al repositorio de código con alguna tarea más sencilla que resolver, o se me invitaba a tener una semana entera «llena» de reuniones de contexto e integración. Pero un buen proceso de onboarding va mucho más allá del conocimiento de áreas como RRHH y los beneficios que ofrece la empresa, y muchos aún no se dan cuenta de ello.
Así que, basándome en mi experiencia en Belvo, he reunido algunos puntos que considero vitales para un onboarding exitoso.
1. «Empecemos por el principio»
Todo onboarding debe comenzar con la Visión, la Misión y los Valores, y esto quedó muy claro durante el proceso de Belvo. Estos factores son fundamentales para el éxito de todos. Y nosotros, como nuevos empleados, debemos buscar esta información lo antes posible, para poder alinear nuestras propuestas de trabajo con la cultura de la empresa.
Hay muchas maneras de obtener esta información, pero la mejor forma de hacerlo es a través de las personas, desde los fundadores, pasando por los líderes de los distintos departamentos y, finalmente, por todos aquellos que nos precedieron.
2. Entiende los fundamentos del negocio
Sea cual sea tu función, es fundamental que conozcas bien el negocio para que tus decisiones estén en sintonía con los objetivos de la empresa.
Por lo general, las empresas proporcionan una cantidad considerable de documentación al respecto, pero no te detengas ahí… Habla con la gente para entender en la práctica cómo puede afectar tu función al cliente. De este modo, se obtiene una visión global y se facilita la planificación de las tareas.
Una forma interesante de hacerlo puede ser, siguiendo otro ejemplo que tuve en Belvo, con demos de productos, en los que el empleado recorre la experiencia del cliente durante un día.
3. Comprende los objetivos actuales
Varias empresas utilizan metodologías para crear y seguir sus objetivos principales, como el método OKR (Objetivos y Resultados Clave) utilizado por Belvo. Comprender los objetivos más amplios y cómo se desglosan para tu equipo es una guía importante para planificar y ejecutar las tareas.
Tener estos objetivos en mente es una buena manera de ver si las tareas del día a día tienen sentido.
4. Reúnete con personas clave
Además de conocer muy bien el equipo con el que se va a trabajar, es importante saber que hay varias personas de otras áreas que pueden ayudar mucho en el día a día. Una empresa está dividida en departamentos, pero al final todos tenemos que colaborar para lograr el éxito y para ello la comunicación es fundamental.
Habla con personas tanto a nivel estratégico como operativo. Todos ellos harán una aportación valiosa, y esto también ayudará a crear relaciones que sean valiosas para la comunicación entre áreas.
5. Entiende los procesos de trabajo
Es fundamental conocer los procesos de trabajo ya establecidos antes de hacer sugerencias a partir de experiencias previas y de otras organizaciones: cada empresa tiene su cultura y no siempre lo que tuvo éxito en el pasado se aplica en el presente y esto también se aplica a los fracasos.
Por lo tanto, tratar de entender cómo funcionan estos procesos ayuda a una mejor integración. En Belvo, estas documentaciones eran muy detalladas para ayudar a los recién llegados en el proceso – pero si la empresa no tiene documentaciones sobre estos procesos, este es un buen momento para construirlo. Con el tiempo, puedes sugerir mejoras si ves problemas y oportunidades.
6. Conoce las aplicaciones de gestión
Probablemente utilizarás aplicaciones internas que te ayuden a diario o semanalmente, como los sitios web que te ayudan a gestionar equipos o a contratar personas. Conocer los detalles de estas herramientas puede impulsar tu integración y ayudarte a utilizar los recursos de forma más eficiente. Haz una lista de lo que crees que es importante y pide ayuda para resolver las dudas.
En Belvo utilizamos Notion para centralizar toda la documentación que he mencionado en los ejemplos anteriores. Es importante dejar toda la documentación en el mismo lugar, porque facilita mucho la gestión de la información. Además, esta herramienta puede conectarse a otras herramientas que utilicemos como Jira, Slack o Github
7. Profundiza en el aspecto técnico
Esta es la parte que más se diferenciará (según el puesto). En mi caso, entender el lenguaje y la arquitectura de las implementaciones es esencial. Incluso para aquellos que ya están familiarizados con la parte técnica, es importante recordar que cada sitio tiene su particularidad y, por lo tanto, es esencial entender los detalles.
Un onboarding bien planificado es beneficioso para todos los involucrados
Estos fueron los puntos estratégicos que hicieron que mis primeros pasos en Belvo fueran mucho más eficientes y agradables, quitando el peso de una fase en la que tienes que lidiar con muchas cosas nuevas. Y recuerda: a menudo se necesita mucho tiempo, incluso meses, para hacer todo esto, así que no tiene sentido tratar de acelerar los pasos.
Además de las reuniones en varias áreas que ya estaban preprogramadas en el calendario, algunas de ellas fueron grabadas. Esto fue muy interesante porque pude acomodarlas en los momentos que más me interesaban, además de poder repasarlas cuando lo necesitara.
Muchos de estos puntos estaban en el programa oficial de Belvo sobre el onboarding, pero otra parte estaba en una planificación pensada por mi líder con las partes relevantes para mi puesto.
Cuando se nota este cuidado con el ingreso de un nuevo miembro de la empresa queda (súper) claro lo importante que es que la persona entre de la mejor manera posible.
¿Te han gustado estos consejos? ¿Qué tal si las ponemos en práctica? Y, si por alguna razón no tuviste una buena experiencia, es importante recordar que puedes ser parte del cambio de la cultura de tu empresa. Trata de recordar todas las dificultades que tuviste y ayuda a formar un manual de onboarding y más que eso, ayuda a construir la guía específica para las personas que van a trabajar contigo.
¡Éxito siempre!
